Que la luz del conocimiento nunca opaque a la preciosa luz del Ser.

martes, 26 de noviembre de 2019

Genesis 24-11... a la Casika

Rodeada de arte y luz, poesía y belleza, por una profunda paz y armonía, rodeada de amor, impregnada de él, motivada y movida por el; me desplazo en el espacio que es mi hogar, reconociéndome en cada rincón como quien se descubre en el oasis tan ansiado y se deja llevar por sus aguas tocada por la cálida luz del sol. Respirando el delicioso aroma de la Guayaba voy descubriendo en los colores de mi entorno las historias y sueños que lo hicieron posible. Al cerrar mis ojos casi puedo ver las muchas manos que, plenas de juventud y ansiedad, le dieron forma y lo dotaron de esa naturaleza ecléctica que lo hace único en el mundo. Mientras lo recorro surgen desesperadas las voces de mi mente, insistiendo en mantenerme anclada a los días pasados; la experiencia, la muy autoritaria experiencia, una y otra vez intentando ahuyentar la frescura del asombro, de esconder la poderosa verdad de la incertidumbre. Pero en medio de la tormenta escucho y observo también a esa mujer que camina decidida, respirando, sintiendo y que comprende el porqué de los caminos que la condujeron a este instante, el porque de aquellos seres que tomaron su mano en el momento del extravío. Nada, nada pudo haber sucedido de otra forma. No hay nada que cuestionar, nada de lo cual arrepentirse o vanagloriarse porque todo ha sido de la exacta forma en que debió ser. Sentada al pie del árbol amigo, protegida por sus ramas y tocada por la energía de sus hojas recojo lenta y delicadamente mis ilusiones entre los dedos, como quien cuenta los pétalos mínimos de un arbusto nunca podado, y voy tomando consciencia de esa otredad que me acompaña con su trino animoso. Con su ronroneo seductor ella se acerca a mí acariciándome con su tibio pelaje y mirándome fijamente confiada se echa dormir en mi regazo. Una larga columna de hormigas ajetreadas marcha en frente y a mi alrededor conduciéndome a su pequeño gran mudo donde no existe el mañana. Siento entonces el Genesis recorriéndome toda… fluyendo entre mis venas con intensidad, llenando mis pulmones, mojando cada poro de mi piel y manando de mis ojos cerrados que ahora contemplan serenos este momento de éxtasis.

miércoles, 6 de noviembre de 2019

FELIZ HALLAZGO

Feliz tu corazón, si verifica que algunas soledades llegan a ser perfecta compañía y que el silencio no es pura ausencia de sonidos ni la noche la sucesora autómata del día ni un misterio constituye la música polífona del agua cuando de plena libertad disfruta, y menos la transparencia del aire que transporta el mensaje ignoto del aroma En realidad y en suma más feliz si acepta como dogma la humana excelsitud del sentimiento De Eternitud del corazón José Antonio Escalona Escalona

Tengo Ganas

Tengo ganas de saberte, de saborearte, de mirarte desnudo e imaginar tus sueños para colarme en ellos... tengo ganas de compartir mis gemidos con los tuyos; de viajar entre tus brazos a través de mares, nubes y montañas... para reírme de los "no se puede" demostrando que somos de otro mundo.

Amor por igual

Tomar consciencia del prejuicio debe llevar inmediatamente a liberarse de el, sin demoras, sin excusas, lo extirpas como un grano de grasa en la piel, consciente de que surgirá de nuevo, quizá en el mismo lugar o en otro. Nos conviene mantenernos alerta ante este desagradable evento mientras encontramos en nuestro interior la medicina correcta para prevenirlo.